28/7/25

Fototeca digital


CRECE NUESTRA FOTOTECA DIGITAL

Prof. Raquel Gail © *


Desde 2012 estamos solicitando donación de fotografías de todos los tiempos para desarrollar la fototeca digital que enriquecería el acervo fotográfico en soporte papel que conservamos cuidadosamente, superior a los 600 ejemplares.

Hoy hemos recibido, por gentileza del coleccionista quilmeño Mauro Murillo, una secuencia de imágenes que refleja la trayectoria estudiantil de César Augusto Rennes (f. 1989) desde 1930 hasta 1941. Agradecemos especialmente a su nieta Marina Rennes la generosidad de compartirlas con la persona que sabrá conservarlas como merecen.

Entre las numerosas virtudes que poseen, las colecciones familiares revelan usos y costumbres de épocas que escapan a la memoria y nos muestran los rostros de quienes, para el público, son solamente nombres impresos o algunas vez oídos.

Primero Superior año 1930


Tercer grado año 1932

Atrás dice: "César Augusto Rennes, a los nueve años de edad. Alumno de 3er grado. Fotografía tomada el día 20 de abril del año 1932 en la Escuela Normal Mixta de Quilmes."

5º grado "B" año 1934, mayo 30

Probable 1er. año ¿1938? anverso

Misma foto anterior, dedicatorias (¿1938?)


Probable 2º año ¿1939?, 
Director Juan Manuel Cotta, 
Regente Irene Sofía Rodríguez Garay a su derecha
y Prof. Ana Luther a su izquierda


Probable tercer año ¿1940?, Director Juan Manuel Cotta y 
Vicedirectora Josefa Lombán de Casado


Fecha incierta ¿1941 ó 1942? 4º B

Misma foto anterior, dedicatorias (a)

Misma foto anterior, dedicatorias (b)

Misma foto anterior, apellidos

Curso de Dafne Frignoni de Rennes (4º B Promoción 1942 de Maestros). 
"Sentados: Márquez (Amelia Nieves), Varela (Nélida), Ana Luther (Profesora), Lezi, Cotta (Juan Manuel, Director), Sra. de Casado (Josefa Lombán, Vicedirectora), Irene Sofía Rodríguez Garay (Regente del Departamento de Aplicación), Páez (Esther), Blanco (Emma).
De pie: Laso (María Rosa), Rey (Obdulia), Cartasegna (María), Cotta (Blanca Helena) [1], Carretero (Inés), Ormart (Lucía), Frignoni (Dafne), Desmourés (Celia), Boscatto (Delia), Vazquez (María M.), Ponciolo (Nelly), Sta. Lomani, Sta. Alfonso.
Atrás: Pazos (Osvaldo Rubén), Lomuto (Alfredo O.), Maffi (Eduardo), Hitters (José G.), Rave (Luis), Moreno (Jorge), Ferro (Rodolfo), Velardo (Raúl Rosario), Geronés (Carlos Alberto), López, Codino (Horacio), Priani (Alberto), Sabato (Jorge Alberto) [2], Borrell (José Ignacio), Berro (Luis César), Ayola Gauna (Velmiro), Salinas (Mario), Ingrassia (Juan Carlos)."



ACERCA DEL PADRE 
DE CÉSAR AUGUSTO RENNES    

Transcribimos a continuación fragmentos publicados por Chalo Agnelli sobre Gustavo Francisco Rennes, padre del niño de las fotografías mostradas arriba.

Decía el diario "La Nación" del 23 de octubre de 1937:

QUILMES. — En la Escuela Nor­mal Mixta se llevaron a efecto hoy, como parte del programa de celebra­ción de las bodas de plata, los siguien­tes actos: las alumnas del Colegio Nacional, dirigidas por el profesor Gustavo Rennes, cantaron el Himno Argentino; acto seguido [...]

...............

En 1935, el Conservatorio Williams tenía 170 sucursales desparramadas por todo el país. La sucursal local era la Nº 9. Estuvo, en un primer momento, en la calle Rivadavia 82 y luego en Alsina 345, esquina con Mitre. Se dictaba: solfeo, armonía, piano, violín, violoncelo, canto, arpa, declamación y guitarra. El director y secretario fue el maestro Gustavo F. Rennes.

La sucursal de Quilmes fue fundada en 1907, por el mismo Williams, María Luisa Carranza Frías, Cayetano Argenziani y Gustavo F. Rennes. El primer concierto se realizó el 16 de junio de 1907, en el salón municipal (actual Casa de las Culturas) a beneficio de la Conferencia San Vicente de Paul. Participaron los profesores: Sélika Ramírez, Argenziani, Vicente Maccaroni, Rennes y J. Leónidas Piaggio y los alumnos Ana Angeletti, Raquel Sol, Adelaida Sarmiento, María Ester Llull, Raquel Cichero, Regina Cichero, Mercedes Von Kotsch, María L. Angeletti y Pedro Videla.

Gustavo F. Rennes fue el que estableció la sucursal del Conservatorio Williams en el pueblo de Quilmes en 1907, junto con Argenziani y la Srta. María Luisa Carranza Frías. Fue secretario de la Institución. Había estudiado en el Conservatorio de Buenos Aires, donde fue discípulo de los maestros Maurage y Maccarone, egresando como profesor de violín, de solfeo y de música de conjunto. Emprendedor, bregó por inculcar a las generaciones quilmeñas el espíritu musical que lo animó y le permitió realizar una trascendente labor docente, poniendo al servicio de su causa inteligencia y saber.

Formaron parte del cuerpo docente durante los primeros años de la sucursal Quilmes: Emilia L. Wagner (piano), Celia G. Gravell de Rennes (piano y solfeo) [3], Leopoldo Stiattessi (canto) [4], Luis Cione Pagano (declamación), J. Leónidas Piaggio (violonchelo) [5], además de los fundadores, los maestros: Argenziani (piano, armonía contrapunto y composición) [6] y Rennes (violín y música de conjunto). En 1927, se agregó como subdirector Celestino Piaggio [7].



NOTAS:

Será necesario cotejar con los documentos que obran en el Archivo para resolver las dudas sobre la datación de las fotografías.

[1] Blanca Helena Cotta, una de las hijas del Director, conocida por sus habilidades culinarias, se casó en segundas nupcias con Carlos Alberto Geronés, condiscípulo en este mismo curso.

[2] (4 de junio de 1924 - 16 de noviembre de 1983). Físico y tecnólogo de formación científica autodidacta; destacado en el campo de la metalurgia y de la enseñanza de la Física. Hijo de Vicente Esteban Sabato y Brígida Condron, era sobrino del escritor Ernesto Sabato. Luego de egresar del magisterio, en julio de 1947 se recibió de profesor de Física en el Instituto Superior del Profesorado "Dr. Joaquín V. González". Fue profesor en las Escuelas Raggio. (Cf. Chalo Agnelli)

[3] Celia Gregoria Gravell (f. 1989), esposa de Gustavo Francisco Rennes y madre de César Augusto. 

[4] (Florencia 1851 - Buenos Aires 1928). Uno de los principales maestros de canto y director de coros de Buenos Aires, padre de César (1881-1934), artista favorito de la colectividad italiana.

[5] Era argentino naturalizado. Sus padres le habían dado por nombre José, el nuestro músico tomó luego legalmente por segundo nombre el de Leónidas, con el cual se dio a conocer en forma profesional. Si bien en un primer momento realizó estudios de piano junto a su padre, al ingresar al Conservatorio de Música de Buenos Aires dejó de lado este instrumento para abocarse al estudio del violonchelo bajo la guía de Carlos Marchal. Con Alberto Williams tomó cursos de armonía y composición. En el citado instituto alcanzó los diplomas de profesor de su instrumento (1904) y de Solfeo (1905), y obtuvo dos Premios como intérprete (Medalla de Oro en 1906 y 1907). A lo largo de su carrera realizó giras por el interior del país, la República Oriental del Uruguay y el Brasil, destacándose no sólo en calidad de solista, sino también en conjuntos de cámara tales como el Cuarteto Diapasón, fundado por Edmundo Weingand. Con esta agrupación efectuó el célebre ciclo de la Historia del Cuarteto (Asociación Wagneriana de Buenos Aires, 1918) y la Audición Integral de los Cuartetos de Cuerdas de Beethoven (Sociedad Argentina de Música de Cámara y Sinfónica, 1921). Además ejerció la docencia en el Instituto Musical "Maffioli y Solá", Instituto Nacional de Ciegos, y los conservatorios de Música de Buenos Aires, de Música de San Martín y Piaggio, del cual ya en 1919 era director. Su meritoria trayectoria interpretativa le valió no sólo el elogio y el reconocimiento de la crítica, sino también el de sus colegas y el de las instituciones en las cuales había actuado. Ejemplo de ello fue, la carta firmada por Carlos López Buchardo en calidad de Presidente de la Asociación Wagneriana.

[6] Discípulo de Alberto Williams y de Julián Aguirre, fue co-fundador del Conservatorio que ideara su maestro, donde ocupó el cargo de sub-director. Era profesor de piano, solfeo, armonía, contrapunto y composición. Sus vastos conocimientos musicales, sus dotes de artista y sus cualidades personales lo definieron como un formador imprescindible.

[7] (Concordia, 20 de diciembre de 1886 - Buenos Aires, 26 de octubre de 1931) fue un compositor, director de orquesta y pianista argentino. Estudió en la Schola Cantorum de París. Celestino era hijo de Víctor (o Victorio) Piaggio y Luisa Monti, quienes tuvieron nueve hijos, de los cuales 6 se destacaron en la música: Víctor, Celestino, Leónidas, Amelia, Leonor y Elsa. Celestino junto con su hermana pianista Elsa, con quien grabó un álbum con obras para piano de Ernesto Drangosch y Manuel Gómez Carillo.

FUENTES:

21/7/25

Catedrática y Vicedirectora


MARÍA JOSEFA GABRIELA LOMBÁN AGUERREBERE DE CASADO *

Prof. Raquel Gail ©


La Sra. Lombán de Casado nació en Mercedes (Pcia. de Buenos Aires) el 5 de enero de 1884, segunda de los cinco hijos que tuvieron Luis Felipe Lombán (1830) y Francisca Arreguebere (1851). El padre, inmigrante asturiano, instaló en esa antigua ciudad la primera fábrica de velas, jabones y aceites.

Sus hermanos se llamaron Luis Eduardo (1883), Joaquín Antonio (1885), Eda Ernestina (1887) y Alejandro José (1888). El segundo, Joaquín, era el padre del conocido docente, historiador y escritor asentado en Quilmes, Juan Carlos Lombán. Josefa contrajo matrimonio en 1910 con Pedro Carlos Casado Álvarez (1881) y tuvo sólo una hija, María Elina, apodada Chila (1914).

Se recibió en la Escuela Normal Nacional de Mercedes [1] , de la que era director Víctor Mercante, y su título fue expedido el 4 de marzo de 1903. Inmediatamente fue nombrada en la Escuela Nº 1 de Suipacha [2] hasta que, en agosto, pasó a prestar servicios en la Escuela Graduada Nº 2 de Chivilcoy. En ese período esta escuela recibió la donación de "un piano, una mesa y otros útiles de que carece" [...] "para que las clases de Música y Labores puedan darse con éxito" según expresa la nota presentada por una comisión de mujeres reunidas a tal fin [3]. Renunció porque fue designada maestra de grado en la Escuela Normal de Chivilcoy que acababa de crearse, donde permaneció desde el 1º de marzo de 1905 hasta el 28 de febrero de 1909 [4]. Esta institución luego se llamó Escuela Normal Mixta “Domingo Faustino Sarmiento” y en la actualidad recibe el nombre de Escuela de Educación Secundaria Nº 205 "Domingo Faustino Sarmiento". Desde abril de 1909 hasta febrero de 1911 trabajó en la Escuela Nº 5 de Mercedes.

Entre 1916 y 1921 fue catedrática en la Escuela Normal Popular de Mercedes [5], ascendiendo a la Dirección por los últimos cuatro años. Simultáneamente, desde noviembre de 1919 hasta octubre de 1922 estuvo a cargo de una cátedra de Educación Física y Estética y de allí se le dio traslado como Regente a la Escuela Normal Mixta de Chivilcoy. El cargo de Regente implicaba la conducción de la cátedra denominada Crítica, de suma importancia en la formación de los educacionistas. En mayo de 1923 fue ascendida a Vicedirectora con 6 horas de Ciencias y Letras hasta que, por decreto del 9 de agosto de 1928, fue trasladada con igual cargo y 9 horas de Ciencias a la Escuela Normal de Quilmes en reemplazo del Sr. Olivio J. Acosta que se había jubilado como vicedirector. Hasta el 2 de mayo de 1938 fue suplente de la regente Crescencia López Oliveros de Molina y profesora de Geografía con 2 horas cátedra. También dictó las asignaturas Pedagogía y Francés.


Josefa Lombán de Casado se jubiló a avanzada edad, en 1944, pero nunca se retiró completamente de la docencia, ya que a partir de ese momento se desempeñó en varios ámbitos culturales de Quilmes. En 1942, fue designada para integrar la primera Comisión Municipal de Cultura junto con el Dr. Alberto Iacobucci, el Dr. Emilio Caset, Armando Bucich, Gustavo Rennes, Roberto Fossati, Víctor Roverano y Adolfo Bazán. Este organismo, creado por el Dr. Fernando Pozzo cuando fue comisionado municipal (15/5/40-15/4/41) se oficializó durante la intendencia del Dr. Manuel J. Cruz, el 7 de julio de 1942 por la ordenanza Nº 1333 y tenía por función organizar y concretar diversas actividades de difusión artística-cultural.


NOTAS:

* Este artículo toma como base el publicado por Chalo Agnelli en El Quilmero en junio de 2012.

[1] La Escuela Normal de Mercedes es una de las primeras escuelas normalistas que se crearon en la Argentina, bajo el impulso del Estado Nacional. El 23 de marzo de 1887, siendo Presidente de la República el Dr. Miguel Juárez Celman, y Ministro de Justicia e Instrucción Pública el Dr. Filemón Posse, se firmó el decreto por el cual se la creaba. El primer local que ocupó fue la casa de la calle 22 y 23, un salón del que luego fue Instituto Lowe, hoy 29 y 26, fincas que abarcaban donde actualmente funciona el juzgado en lo civil Nº 3. Siendo estrecho el local, la Dirección solicitó otro que ocupaba la Escuela Nº 5, ex calles 24 y 21, hoy Escuela Nº 2, contiguo al que funcionaba la Escuela Normal al Presidente del Consejo Escolar, Sr. Justo Dillón. El mismo, lo concedió por tres años en el mes de agosto del mismo año. Las clases comenzaron el 12 de marzo de 1888 con 6 alumnos en 1º año, 10 en 2º año y 218 en el Departamento de Aplicación. En 1889, tuvo 3 cursos normales. En 1903, empezaron las gestiones y poco después se aprobaba la ley de edificación escolar que comprendía a la Escuela Normal de Mercedes. El constructor, París Giannini, de acuerdo con la distribución dada por el Sr. Mercante, proyectó el plano que, con pocas variantes, aprobó la Oficina de Arquitectura. En 1907, la Escuela ocupó su nuevo y amplio local en la manzana comprendida por las calles 29 y 27; 36 y 38. Desde 1889 a 1906, se diplomaron 186 maestros de ambos sexos. Desde 1907 a 1936 más o menos 1050. Seguidamente, cientos de egresados surgieron de sus aulas
[2] Pequeña localidad en el norte de la provincia, hoy cabecera de partido, conectada por el ferrocarril con Mercedes y Chivilcoy.

[3] Revista de Educación, Año III, Nº 6, junio de 1904, pág. 439.

[4] El 12 (según otras fuentes el 18) de abril del año 1905, se creaba en la ciudad de Chivilcoy la Escuela Normal Nacional Superior, durante la presidencia de Manuel Quintana y la gobernación de la provincia de Buenos Aires en manos de Marcelino Ugarte. En el momento de su creación ocupó el edificio donde hoy se encuentra el correo y la nueva sede fue inaugurada en 1912, siendo ésta la que utiliza hasta la fecha (2005). Su primer cuerpo docente estaba constituido por el director Alejandro Mathus (1870-1921), la vicedirectora Clelia Táliche, regente Welindo Palavecino y secretario José M. Gómez. Algunas personalidades que dejaron su huella en el establecimiento fueron Julio F. Cortázar, David A. Almirón, Juan Manuel Cotta (nuestro segundo Director en Quilmes), Mariano Serafín, Leontina Poch y Delia Garibotti. <http://www.hcdn.gov.ar/dependencias/dcomisiones/periodo-122/122-2138.pdf.>

[5] Luis Martínez Urrutia – escribano y profesor de enseñanza secundaria – fue presidente, director y profesor de la Escuela Normal Popular, rector y profesor del Colegio Nacional Florentino Ameghino, profesor de la Escuela Normal Justo José de Urquiza y comisionado escolar en la Ciudad de Mercedes. Escribió una Reseña Histórica en 1955 sobre esta Normal. Con el objetivo de recuperar el pasado, actualizarlo y ponerlo en cuestión, casi 35 años después de la experiencia, el autor restituye a través del texto una experiencia casi olvidada “que creó valores en la sociedad y que señalará su existencia en tanto esos valores tuvieron permanencia”. “La Escuela Normal Popular inició sus clases regularmente el 1º de abril de 1912 (…) y durante todo el ciclo escolar desarrolló su benéfica acción docente preparando en sus aulas a los aspirantes a maestros infantiles…” Ese mismo año, las autoridades elevaron a la Dirección General de Escuelas una petición de reconocimiento fundada en el reglamento de creación de la Escuela Normal Popular. El Honorable Consejo de Educación resolvió dar validez y reconocimiento a los títulos que allí se expidieran, con igual reconocimiento que los expedidos por el propio Consejo, nombró los tribunales examinadores y acordó las fechas para la celebración de exámenes. En 1914 la escuela se dio su estatuto, en el que, entre otros considerandos establecía la publicidad de todos los actos y resoluciones de la institución “a fin de entregarlos al pueblo para su conocimiento y fiscalización” y generó el primer contingente de egresados “con la suficiente ilustración para desenvolverse cumplidamente en la delicada labor educacional”. Opiniones de prestigiosos educadores destacan el valor de la experiencia realizada. Víctor Mercante señaló que “en organización, en programas, en catedráticos, en alumnos, en nada resultan inferiores a las escuelas normales de la Nación; a veces las exceden porque hay más empeño en los elementos que trabajan". Carlos Vergara, que fue director de la Escuela Normal Nacional de Mercedes, planteó en un estudio sobre los problemas de la educación en la América española que “la acción popular es para el progreso lo que el sol para fecundar la tierra (…) A mi juicio, las escuelas normales populares encarnan la salvación de la escuela argentina, completamente desnaturalizada por las despreciables rutinas”. Ernesto Nelson opinó que “si al margen de la ley y ante la sonrisa despectiva del oficialismo se ha podido promover un movimiento tan intenso como el de las escuelas normales populares, ¿cuán inmenso no sería el estímulo de los vecindarios llamados a ser realmente árbitros de sus propios destinos educacionales?”. Para Rufino Bello “la Escuela Normal Popular de Mercedes, que ha sido la primera de este carácter fundada en la provincia, ha plantado jalones inconmovibles en la senda a recorrer” <http://www.bnm.me.gov.ar/novedades/?p=101>


FUENTES:

Documentos del Archivo Histórico "Silvia Manuela Gorleri", Escuela Normal de Quilmes.
Guevara, Raúl (2006). Jurisdicción transfederal. La leyenda de la Ley 1420 y otros mitos porteños en educación. Universidad Nacional de Lomas de Zamora, Facultad de Ciencias Sociales. Edición del autor.
Herrero, Alejandro (2020). "Las Escuelas Normales de la Provincia de Buenos Aires. El Caso de Mercedes, 1911-1920." En  Épocas. Revista de Historia. ISSN 1851-443X, FHGT-USAL, Buenos Aires. Nº 20, primer semestre 2020, [pp. 125-143].
Martínez Urrutia, L. (1955). La Escuela Normal Popular. Reseña histórica. Mercedes. Talleres Gráficos Cassani. 
Revista  Anales de la Educación Común, La Plata, Buenos Aires. Varios años.
Revista de Educación, La Plata, Buenos Aires.
Rodríguez, Laura G. (2022). "Las primeras Escuelas Normales de la provincia de Buenos Aires (Mercedes, Azul, Dolores, San Nicolás y La Plata): el arribo de una burocracia nacional a las ciudades del interior (1887-1920)". En Ejes de economía y sociedad 6(11), 134-160. https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.17468/pr.17468.pdf 

17/7/25

De Toro y Gómez


CLARA MARÍA DEL CARMEN FLORENCIA DE TORO Y GÓMEZ

Prof. Raquel Gail ©


También conocida como Clara de Toro y Gisbert, por el apellido materno, era hija del prestigioso lexicógrafo Miguel de Toro y Gómez [1] y de María de la Purificación Gisbert y López. Nació el 8 de junio de 1891 en París, ciudad donde se educó. Tuvo al menos dos hermanos mayores, el Dr. Miguel de Toro y Gisbert (1880-1966) [2] y el Ingeniero Carlos Antonio Vicente de Toro (1884-1945) [3].

Se licenció en Filosofía y Letras en su ciudad natal en 1912, el mismo año que falleció la madre a los 61 años. El hermano radicado en Argentina, Carlos, la convenció para que emigrara y así llegó con el padre a nuestro país. Su formación académica se habrá visto influida, sin duda, por la experticia de su padre en la materia.


En 1916 se la designó para hacerse cargo de las cátedras de Castellano y de Francés de 2º y 4º año en la Escuela Normal de Quilmes, lo que parece haber sido su debut docente. Luego fue Profesora de Gramática Histórica y de Idioma Nacional en la Escuela Normal de Profesoras Nº 1 y en el Instituto Nacional del Profesorado Secundario. 


Escribió varios libros de lectura para la escuela primaria: "La escuela y la vida" editado en 1922 (3er. grado) [4], "El hogar de todos" publicado en 1923 (4º grado) y "Almas en flor", publicado en 1924 y autorizado en 1925 (5º grado), que componen una trilogía. Sus obras se diferencian de otras contemporáneas porque los textos se encuentran acompañados por ejercicios de lenguaje, que según su redactora, “…responden al concepto moderno de la enseñanza de la gramática por medio de los textos…”; además de contar con palabras explicadas. Por otra parte, editó "Batir de alas" (1º Superior), todos impresos por Kapelusz, casa editora a la que su representante legal cedió los derechos en 1957.

El hogar de todos, pág. 101

Según el análisis que hace Agustina Mosso en su Tesis, "ella [...] no escribió para alfabetizar sino para anexar a las prácticas educativas cotidianas saberes que excedían la experiencia escolar básica y pensaban las ciencias sociales y naturales, la literatura y la instrucción cívica bajo una mirada más compleja que ejercitara la lectura experimentada en los años escolares previos a los que sus libros se destinaban"... "Los tipos documentales que la representan en su mayoría se vinculan a los libros de texto escolares que pensó, escribió y publicó. Con los mismos, [...] la escuela primaria argentina emprendió el trabajo de formar lectores/as y orientarlos/as en contenidos y modos de leer."

`La escuela y la vida´ incluía lecturas con contenidos de "geografía, historia, ciencias naturales-física y química, instrucción moral e instrucción cívica. La introducción dejaba en claro los objetivos de la maestra: brindar lecturas provechosas cuyo objeto era formar un lenguaje puro y un vocabulario variado y diverso. A este libro de lectura Clara lo ordenaba según cuestionarios con el fin de estimular en el estudiantado el establecimiento de relaciones entre sus vidas y las lecturas: reflexiones aplicadas luego en prácticas morales y decentes [...] el foco estaba colocado en la formación moral de niños y niñas". (Mosso)



En la lectura que dedica a hacer un "Paralelo entre Belgrano y San Martín, que incluye retratos de ambos y cuyo autor es Mitre, las palabras explicadas son fisonomía, ambiciones bastardas, la vulgaridad, poder magnético; el ejercicio de lenguaje exige indicar sinónimos para entenderse, abnegación, poderosa, elevada, mando, acciones, guerra, constancia y el cuestionario cierra con ¿Qué ejemplo nos da su conducta?, pregunta que hace referencia directa a estos dos hombres a los que considera naturalezas superiores." (Poggi)

     

"En el intento por escribir su libro, la maestra leyó textos del productor literario francés Javier Marmier (1808-1892) como así también novelas históricas defensoras de los derechos de las mujeres pertenecientes a los hermanos Pablo (1860-1918) y Víctor Margueritte (1866-1942). Este último fue un reconocido novelista nativo de Francia, autor dramático, activista pacifista y feminista. Además, el libro presentó fragmentos de las fábulas de Samaniego, interpretadas por M. de Toro y Gómez (como Adelina con su padre), del novelista romántico francés Víctor Hugo (1802-1885) y del periodista español José Selgas (1822-1882)." (Mosso)

"...entre lecturas argentinas, españolas y francesas la autora Clara de Toro armó un índice que subdividía temas generales en pequeños grupos donde relacionaba la familia-el hogar, la patria, la conducta-defectos y cualidades, la naturaleza y el trabajo-la escuela. El libro también osciló entre textos del químico español Enrique Herrero Ducloux (1877-1962), del catedrático rosarino Enrique Rivarola (1862), del químico francés Luis Pasteur (1822-1895), del poeta español Miguel Agustín Príncipe (1811-1863) y del escritor danés, famoso por sus cuentos para niños y niñas, Hans C. Andersen (1805-1875). (Mosso) 

"Almas en flor dispersó lecturas compendiadas por la maestra autora. Las mismas podían transcribirse en decisiones específicas. [...], reparó no solamente en la importancia de los contenidos a enseñar sino también en los modos de aprender. Para que esto pasara, colocó detrás de las lecciones cuestionarios que llevaban a los y las estudiantes a la reflexión sobre lo que leían, en tanto pauta para el establecimiento de vínculos entre acciones e ideas" (Mosso). Al respecto decía: “Nuestro cuestionario tiende a acostumbrar al alumno a observar su propia conducta y a organizarla conscientemente de acuerdo con sus ideales”.

La tesista, sin embargo, no analiza "Batir de alas", su último libro, que tiene características estructurales semejantes pero propósitos diferentes, al estar destinado a estudiantes más pequeños. Lo explica ella misma en la Introducción. Hay que decir que, en primer lugar, la tipografía es de mayor tamaño, como era habitual en los textos para grados inferiores. Mantiene la explicación de vocablos y el cuestionario final que practicó en los anteriores.


He aquí la primera parte de la Introducción, en la que justifica los recursos que emplea. En la página siguiente agrega: "si bien hemos tratado de emplear generalmente las palabras más corrientes, para asegurar una más fácil comprensión, hemos querido, sin embargo, conciliar ésta con un enriquecimiento progresivo del lenguaje. Para ello empleamos de cuando en cuando palabras menos conocidas, cuyo significado está contenido en el Vocabulario que figura al final de la lectura. En el mismo Vocabulario indicamos a veces, a propósito de algún término de la lectura, una o más palabras de la misma familia, pues no sólo se enriquece así el lenguaje, sino que se acostumbra el niño a coordinar sus conocimientos." 

"En los Cuestionarios, muy sencillos, naturalmente, como corresponde a la edad de los lectores, apunta el propósito que hemos desarrollado con aprobación de los Srs. Maestros en los libros más adelantados. Consiste en hacer reflexionar al niño acerca de lo que lee, después de haberse cerciorado de que lo ha comprendido." [5]


Además del Índice de lecturas con la numeración de las páginas respectivas, agrega otro Índice temático, que la autora denomina metódico, en el que las lecturas están agrupadas por motivos o asuntos comunes, como se dijo antes, tales como `Cuadros de la vida diaria´, por citar un ejemplo.  Sus obras se reprodujeron a lo largo de muchos años, alcanzando hasta 30 ediciones en algunos casos.


En 1922 se la trasladó a la Escuela Normal de Profesoras. Sabemos que en 1927 también prestó servicios en dicho establecimiento. [6] En las horas de Francés fue sustituida por Margarita Companc de Pérez Acuña.

No tenemos conocimiento de que haya producido textos para la enseñanza del Francés.

NOTAS:

[1] Licenciado en Filosofía y Letras en la Universidad de Granada, residió en París, donde ejerció como profesor de la Asociación Politécnica y fue oficial de la Academia.​ Periodista, escritor, lexicógrafo, traductor y gramático, autor de obras filológicas e históricas, entre ellas un Diccionario enciclopédico de la lengua castellana.​ Colaboró en publicaciones periódicas como Alrededor del Mundo (1903).​ En su condición de traductor, en 1885 se publicó la versión en español de Rafael, de Alphonse de Lamartine.​ Nació en  Andalucía en 1851 y falleció en 1922 en Buenos Aires. (Wikipedia).

[2] Miguel de Toro y Gisbert nació en Madrid en 1880 y falleció en Buenos Aires en 1966. Hijo de Miguel de Toro y Gómez citado arriba, polígrafo y destacado lexicógrafo, en París se formó en la universidad y trabajó como lexicógrafo para la editorial Larousse casi toda su vida. Responsable de la primera edición española del Pequeño Larousse ilustrado. Nacionalizado francés y enrolado en el ejército, por herida de bala en el hombro izquierdo perdió movilidad en ese brazo. En 1914 fue nombrado académico correspondiente en el extranjero (Francia) y mantuvo una intensa y continua participación en el Boletín de la Real Academia Española. Obtuvo el grado de Doctor en Letras por la Universidad de París en 1927 con una tesis titulada L’évolution de la langue espagnole en Argentine, posteriormente publicada en francés (1933). En 1932 defendió su segunda tesis doctoral, un fragmento del diccionario general de la lengua española, publicada al mismo tiempo que la primera también en París. Fue autor de obras de ortología, gramática y enseñanza de la lengua española. Entre ellas destaca su Ortología castellana de nombres propios (1911), cuya importancia y relieve en la filología hispanoamericana fueron subrayados por Cuervo en su carta prólogo. Merece una mención su Tesoro de la lengua española: ortografía, conjugación […] parónimos (1911, con una segunda edición en 1917). Como pionero de la lexicografía dialectal hispanoamericana y andaluza, merece una mención particular Americanismos (1912), sobre el léxico del español de América y Voces andaluzas (o usadas por autores andaluces) que faltan en el Diccionario de la Academia Española (1920) que, además de destacar por su exhaustividad, sobresale por su concepción moderna, compuesto a partir de un corpus primario de textos literarios y un corpus secundario de textos gramaticales y lexicográficos.    <https://www.bvfe.es/es/component/mtree/autor/10770-toro-y-gisbert-miguel-de.html>

[3] Carlos Antonio Vicente de Toro, recibido de Ingeniero Civil en Francia, se radicó en Argentina luego de venir al país para la construcción del ferrocarril Rosario-Puerto Belgrano. Fue Jefe de la Seccional de Puentes y Caminos de la Nación en Mendoza (1903). Desempeñó luego el mismo cargo en San Juan, donde ocupó además cargos docentes en la Escuela de Minería y en el Colegio Nacional. Más tarde residió en Buenos Aires donde se diplomó en Ingeniería en Petróleo en la Universidad, pasando inmediatamente a ocupar altos cargos en Yacimientos Petrolíferos fiscales (YPF) desde 1930 a 1938. Más tarde ingresó a la Dirección de Minas del Ministerio de Agricultura donde permaneció por espacio de seis años integrando la planilla del personal superior. En el último período de vida fue Jefe de la Sección Explotaciones Petrolíferas de la Dirección de Minas y Geología de la Ciudad de Buenos Aires.

[4] Texto aprobado en mayo de 1923 y, nuevamente, en 1926. Revista El Monitor de la Educación Común, Año 41, Nº 605, pág. 82, y Año 44, Nº 639, pág. 116.

[5] Batir de alas, pág. 4. (Edición 1935).

[6] Boletín oficial.

FUENTES: 

Biblioteca Virtual de la Filología Española. Una herramienta para la sociedad. Sitio web https://www.bvfe.es/es/

Boletín Oficial de la República Argentina, 29/12/1927.

Documentos del Archivo Histórico "Silvia Manuela Gorleri".

Mosso, Agustina G. (2022). Maestras productoras de saberes. Prácticas de escritura, trabajo editorial y disputas intelectuales. Argentina, primeras décadas del siglo XX. Tesis de doctorado, UBA.

Poggi, Marta Mercedes (2020). "Entre la historia y la memoria. Manuel Belgrano en los libros escolares (1880-1930)". Instituto de Estudios Históricos, Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF). En Anales de la Educación Común, Vol. 1, Nº 1-2.

República Argentina. Biblioteca Nacional de Maestros. Buenos Aires.

Revista El Monitor de la Educación Común. Número 627 (1925)

Scharagrodsky, P.; Andrada, M. (2001). `Construcción del "verdadero" hombre en los textos escolares utilizados en las escuelas primarias argentinas´. Diálogos (San José), 2 (4), 1-14. En Memoria Académica. Disponible en: https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.14622/pr.14622.pdf

13/7/25

Profesora Gligo de Vilche


ERNESTINA ELVIRA EUGENIA GLIGO 

DE VILCHE

Prof. Raquel Gail ©



Esta profesora, a diferencia de otras muchas colegas que enseñaban Francés, era argentina. Nació el 3 de marzo de 1916, en el hogar de Nicolás Francisco Jorge Gligo Kevesich (ca. 1880) y María Elvira Piedracueva Castagnino (ca. 1887), casados en el barrio de Almagro en 1906. El padre había emigrado del Imperio Austro-húngaro. Se conoce el nombre de varios hermanos, Elena Haydeé (1907), Juliana Milka Elvira (1910), Wenceslao Oscar Natalio (1911-2001) y Olga María Jorgelina (1917). La mayor, Elena, también era profesora de Francés y Maestra en la Capital Federal (escuela 17, C.E. X, 1932).

Se casó el 10 de diciembre de 1941 con Ángel Oscar Vilche Teves, cordobés (1914) con quien tuvo una hija llamada Cristina Elvira en 1944. Es posible que hubiera más descendientes.

Diplomada de Profesora de Francés en el Instituto Nacional del Profesorado Secundario, además de Maestra Normal Nacional egresada de la Normal Nº 7 [1], se desempeñó en varios establecimientos secundarios; también había obtenido un Certificado de Fonética Francesa de la Universidad de París. Dio cátedra en la Escuela Normal Nº 5 desde 1935 durante varios períodos discontinuos, en la Nº 1 y en la Nº 10 en 1941, en la Nº 7 desde 1942, en el Colegio Nacional "Mariano Moreno" desde 1950 y en la Escuela Normal de Quilmes trabajó entre 1945 y 1949, para regresar el 9 de mayo de 1952, en este caso con carácter provisorio si bien más adelante titularizó. También ejerció en el Colegio Nacional "Domingo F. Sarmiento", en las Normales Nº 3 y Nº 4, y en 1959 en los Colegios Nacionales Nº 2 y Nº 3. Durante estos últimos años acumuló muchas licencias por razones de salud.


NOTA:

[1] La Escuela Normal Nº 7 fue fundada en el barrio de Almagro como Escuela Normal de Maestras por Decreto del Poder Ejecutivo Nacional del 5 de enero de 1910 con la firma del Presidente de la Nación, Dr. Figueroa Alcorta. Los cursos comenzaron el 16 de agosto de ese mismo año, formando parte de los festejos del centenario de la Revolución de Mayo. El Director Fundador fue el Profesor Olegario Maldonado que rigió los destinos de la Escuela hasta 1939. En 1927 se le impuso el nombre de "José María Torres".

FUENTES:

Documentos del Archivo Histórico "Silvia Manuela Gorleri", Escuela Normal de Quilmes.
Boletín del Ministerio de Justicia e Instrucción Pública.
Web de FamilySearch.
Revista "El Monitor de la Educación Común", Año LII, Nº 718, octubre 31 de 1932.

9/7/25

Madame Collet


MARÍA JOSEFA ADRIANA PATERNOSTER DE COLLET

Prof. Raquel Gail ©

"Madame" Collet, como era conocida en la escuela, nació en Leuven, Brabante, Bélgica en 1872 y falleció en Bernal, a muy avanzada edad, el 15 de octubre de 1965. El apellido Paternoster tiene origen latino, derivado de la expresión "Pater Noster", que significa "Padre Nuestro" en esa lengua. Se relaciona con la oración católica del Padre Nuestro y, por extensión, podría referirse a un fabricante de rosarios o a alguien con una inclinación religiosa. Es bastante frecuente en Bélgica.

Era hija de Ferdinand Joseph (1841-1897) y de Marie Joseph Simal (1850). Tuvo numerosos hermanos, varios de los cuales fallecieron infantes: Edmond Gustave Ferdinand (1865-1866), Hubert Ferdinand Joseph Marie (1869), Marie Claire Ursule Josèphe (1870-1875), Ferdinand Philippe Antoine Marie Joseph (1973), Edouard Gustave Ferdinand Marie Joseph (1875-1876), Émile Louis Marie Joseph (1876), Gustave Marie Joseph (1877), Edmond Gustave Ferdinand Marie Joseph (1875-Bernal, 1958), Berthe Éugenie Marie Joseph (1879), Céline Mathilde Antoinette Marie Joseph Ghislaine (1881) y Pauline Cécile Cornélie Marie Joseph (1886). La familia se estableció en Argentina y el padre, viudo, con 4 hijos fue censado en Campana, provincia de Buenos Aires. Hubert, el mayor de los vástagos supérstites, formó familia en la Capital Federal y fue profesor de piano. Berta se casó con Octavio Amaro Puentes, se radicó en Avellaneda, y tuvo descendencia. 

El nombre completo (castellanizado) de la profesora era María Josefa Adriana Paternoster de Collet, dado que contrajo matrimonio con Luis Collet (ca. 1864), un inmigrante francés que declara ser publicista en el Censo Nacional de Población. Tuvieron varios hijos: Ernesto (ca. 1893), Luis Mario Alberto (f. 1984), Fernando Eduardo (f. 1986) y Rogelio Roberto Iván (ca. 1914). Este último, Capitán de Fragata, fue designado Comisionado Municipal a partir del Golpe de Estado de 1955 y hasta marzo de 1958. La esposa, Martha E. Toresano de Collet (1917-2003) ejerció muchos años, primero como Celadora y luego como profesora de Trabajo Manual y Economía Doméstica en la Escuela Normal de Quilmes, en la que se había recibido de maestra.

"Madame" era profesora de Francés en el Colegio Nacional de Quilmes cuando, en 1950, fue reasignada por un cambio en el plan de estudios a 3 horas de Lengua Extranjera y 2 de Trabajo Manual.



En 1953 se le trasladan las dos horas titulares de Trabajo Manual que dictaba en el Colegio Nacional, a las que se agrega una hora en disponibilidad que conservaba, para dictar Idioma Francés en la Escuela Normal, en una división de 2º año a crearse. De todos modos, no presta servicio pues tiene acordada una licencia por seis meses. Desde el 17 de noviembre de ese año recibe el beneficio de la jubilación.

 











FUENTES:

https://archive.org/stream/Boletin_Oficial_Republica_Argentina_2da_seccion_1950-04-12/1950-04-12_djvu.txt

Documentos del Archivo Histórico "Silvia Manuela Gorleri".

4/7/25

Aurelia Fanelli


El breve paso de Aurelia Fanelli por Quilmes

Prof. Raquel Gail ©



Aurelia Fanelli era hija de Clotilde Galli Ambrosetti y Vicente Isabelino Fanelli Aguiar, casados el 31 de diciembre de 1896 en la Parroquia de la Inmaculada Concepción. Vicente era hijo de un acopiador establecido en Gualeguay, Entre Ríos, de su mismo nombre, y había nacido en 1875. La madre, hija de italianos, nació en 1877, en el radio de la misma Parroquia, donde fue bautizada a los tres meses.

Aurelia nació en Lomas de Zamora el 31 de julio de 1904 y fue bautizada a comienzos de 1907 en Recoleta, en la Parroquia de Nuestra Señora del Pilar. Los padrinos fueron Aurelia Gabrieli Diez (Capital Federal, 1881), hermana de su tío político, juntamente con el esposo Enrique Bossignon (Brasil, 1871). En el acta de bautismo fue asentada erróneamente como Amelia. Una nota marginal indica que contrajo enlace con Carmelo Romano el 18 de diciembre de 1941 en Caballito, con quien tuvo una hija, María del Carmen. Carmelo era italiano, aunque se nacionalizó, y su nombre original era Carmine Maria Giovanni Battista Romano Catapano, oriundo de Castel San Giorgio, en Campania.

Su cuñado, el Dr. Nicolás Romano, fue un médico clínico argentino de la escuela de Mariano Castex. Profesor Titular de Clínica Médica en las Facultades de Medicina de las Universidad de La Plata y luego en la Universidad de Buenos Aires. Habiendo sido el primer practicante del Hospital Durand llegó a ser su Director. Presidió la Asociación Médica Argentina entre 1942 y 1946.


La profesora tuvo al menos dos hermanos, Clara, bautizada en 1911, el mismo día que un hermano menor de nombre Marco Aurelio (1911-1991). Los padrinos de ambos fueron Elvira Felipa Fanelli y su esposo Eugenio Adrogué.

Obtuvo Diploma Superior de la Alianza Francesa el 13 de diciembre de 1928 y en octubre del año siguiente fue nombrada en el Colegio Nacional "Mariano Moreno". A partir de 1935 trabajó en la Escuela Comercial Nº 2 y el 1º de abril de 1936 ingresó a la Escuela Normal de Quilmes con tres horas. En el curso de ese año fue nombrada con más horas vacantes en este último establecimiento hasta que, en diciembre, se dispuso su traslado al Colegio "Manuel Belgrano" de la Capital. Fue reemplazada por J. P. Jorge Rey Cazes en algunas cátedras y por Margarita Companc de Pérez Acuña en otras, mediante el decreto del 2 de agosto de 1937. [1]




NOTAS: 

[1] Véanse nuestros artículos sobre esos profesores, 17/06/25 y 18/06/25 respectivamente.

FUENTES:

Documentos del Archivo Histórico "Silvia Manuela Gorleri", Escuela Normal de Quilmes.
Sitio web de FamilySearch.
Boletín Oficial de la República Argentina, 4 de marzo de 1938.

1/7/25

Día del Historiador

 

1º de Julio

Día del historiador y la historiadora


Replicamos a continuación un breve artículo publicado por la Escuela de Política y Gobierno de la Universidad Nacional de San Martín en la cual se explica el motivo de esta conmemoración.



En el año 2002, el Congreso Nacional a través de la ley 25.566 estableció el 1° de Julio como Día del historiador, para homenajear a “los escritores, investigadores, profesores y aficionados dedicados al estudio, propalación y análisis de los acontecimientos de carácter histórico”.

La fecha elegida recuerda la decisión del Primer Triunvirato en 1812 que encargaba la escritura de la “historia filosófica de nuestra feliz revolución, para perpetuar la memoria de los héroes y las virtudes de los hijos de la América del Sud, y a la época gloriosa de nuestra independencia civil”.

“Sería ciertamente muy doloroso, que después de los grandes sacrificios que se hacen por todas partes a la libertad de la patria, quedasen sepultadas en el abismo de lo pasado las glorias de sus ilustres hijos, y privada nuestra posteridad de unos ejemplos dignos de su imitación”, afirmaba un aviso oficial publicado en La Gazeta unas semanas después de firmado el decreto.

La tarea cayó inicialmente en Fray Julián Perdriel, pero diversas razones económicas y políticas impidieron que el encargo se pudiera llevar adelante. Se hizo, entonces, un nuevo pedido, ahora al Dean Gregorio Funes, quien publicó Ensayo de la Historia Civil de Buenos Aires, Tucumán y Paraguay en 1816, en el marco del impulso que significó la declaración de independencia de las Provincias Unidas en Sud América.

Más de dos siglos después, la labor de las historiadoras e historiadores es muy diferente, en herramientas, métodos y objetivos. Pero, sobre todo, la relación entre pasado, presente y futuro que supone la labor historiográfica no es igual a la que propuso el Primer Triunvirato en 1812.

En una entrevista ofrecida en los últimos años de su vida, Tulio Halperin Donghi recordó que la paradoja de quien se dedica a la historia profesionalmente, lo que hace difícil su tarea, reside en que, para volverse al pasado, tiene que partir del presente; porque no hay manera de partir sino de la propia experiencia presente. Pero al mismo tiempo, tiene que saber que el pasado no es el presente. Aquello a lo que accede a través de la experiencia del presente, no es el presente, sino algo muy diferente, que debe ser observado, analizado y comprendido con herramientas que le son propias como disciplina científica.

En su libro póstumo Apología para la historia o el oficio de historiador, el historiador francés March Bloch analizó la empresa historiográfica a partir de sus principales componentes: un modo de observación y búsqueda de testimonios del pasado; un método de crítica de los documentos que nos llegan al presente; y un tipo de análisis histórico destinado a comprender más que a juzgar.

Detrás de la frialdad de las instituciones y de los documentos escritos, Bloch identifica a “lo humano” como el objeto de la ciencia histórica. “El buen historiador se parece al ogro de la leyenda. Ahí donde olfatea carne humana, ahí sabe que está su presa”. Pero la atmósfera donde su pensamiento respira naturalmente es la categoría de la duración”. No se trata de pensar lo humano sino en relación al paso del tiempo: “Realidad concreta y viva, entregada a la irreversibilidad de su impulso, el tiempo de la historia es el plasma mismo donde están sumergidos los fenómenos y es el lugar de su inteligibilidad”.

Agradecemos a Juan Buonuome, investigador del Centro de Estudios de Historia Política (CEHP/EPyG-UNSAM) y secretario de la Asociación de Investigadores en Historia (ASAIH) por su colaboración en la producción de esta efeméride.


* * * * * * * * 

Lamentamos profundamente que la fecha coincida con la decisión gubernamental de desplazar de su cargo al Director del Museo Histórico Nacional, Prof. Gabriel Di Meglio. Los medios de prensa se han hecho eco del repudio generalizado a que dio lugar esta infortunada e inoportuna medida.




Indignación generalizada: enérgico repudio de historiadores, intelectuales y académicos por el despido de Gabriel Di Meglio del Museo Histórico Nacional

El Instituto Ravignani, la Asociación Argentina de Investigadores en Historia y cientos de intelectuales criticaron la decisión del Gobierno, evaluada como parte de un “ataque generalizado” a la educación pública y la cultura.

Después de la decisión de la Secretaría de Cultura de apartar de la dirección del Museo Histórico Nacional (MHN, Defensa 1600) al historiador y profesor Gabriel Di Meglio, en el cargo desde 2020, historiadores, intelectuales, docentes y políticos expresaron su indignación ante la medida. A partir del 1° de agosto, Di Meglio será reemplazado por la historiadora María Inés Rodríguez Aguilar, que se desempeña como directora nacional de Museos en la Subsecretaría de Patrimonio Cultural, a cargo de la historiadora Liliana Barela. Rodríguez Aguilar fue interventora en el MHN en 2001. En su lugar, asumirá la directora del Palais de Glace, la licenciada en Artes María Paula Zingoni.

Entre otros, el exministro de Cultura Pablo Avelluto (en cuya gestión Di Meglio asumió como director del Museo Nacional del Cabildo y la Revolución de Mayo, por concurso), los historiadores Raúl Fradkin, Noemí Goldman, Hilda Sabato, Ernesto Semán, Marcela Ternavasio, Fabio Wasserman, Roy Hora, Alejandro Morea, Camila Perochena, Federico Lorenz, Ezequiel Adamovsky y María José Navajas, la peruana Claudia Rosas, la canadiense Karen Racine, el francés Gérard Borras, el estadounidense Mark Healey, así como también los dirigentes políticos Myriam Bregman y Juan Manuel Abal Medina, criticaron la decisión del Gobierno en redes sociales y mediante comunicados.

Al anunciar la desvinculación de Di Meglio, la Secretaría de Cultura, a cargo de Leonardo Cifelli, informó que “sigue firme en su intención de concursar los cargos de director de museos”. Por ahora, los concursos brillan por su ausencia.

Durante la gestión de Di Meglio, aumentó la concurrencia de público, se renovó el guion museológico con nuevas perspectivas historiográficas y museológicas y se incrementó la colección del MHN gracias a campañas de donación. En el museo trabajan 45 personas, incluido el director. En 2024, tras el cierre del Museo Nacional de la Historia del Traje, el personal (25 personas) y la colección pasaron a depender del MHN.

Entre las causas del despido, trascendió que las autoridades de la Secretaría de Cultura se habrían molestado porque Di Meglio había revelado a la prensa que el MHN -salvo para el pago de sueldos- no tenía presupuesto asignado (la partida más reciente para gastos de mantenimiento fue de $ 1.200.000); además se opuso al traslado del sable corvo del general José de San Martín (que Manuela Rosas donó en 1896 al fundador del MHN, el historiador Adolfo Carranza) al regimiento de Granaderos a Caballo. No es improbable que el Presidente, que fue nombrado en mayo “granadero honorífico”, quiera devolver la gentileza en agosto, mes en que se conmemora el paso a la inmortalidad de San Martín.



La dirección del Instituto de Historia Argentina y Americana Dr. Emilio Ravignani, a cargo del doctor Julio Djenderedjian y cuya sede Di Meglio eligió para su tarea como investigador del Conicet, lamentó la decisión del Gobierno. “Durante su gestión (que comenzó en 2020), el Dr. Di Meglio modernizó y profesionalizó el trabajo en el Museo, montando exposiciones que generaron gran interés, al punto de triplicar la asistencia de público”, destaca el comunicado en solidaridad con el autor de Historia de las clases populares en la Argentina.

La comisión directiva de la Asociación Argentina de Investigadores en Historia (Asaih), que preside la historiadora Beatriz Bragoni, emitió una declaración sobre la política del Gobierno en los museos históricos nacionales.

“Una vez más Asaih alza su voz ante la opinión pública con el fin de expresar su profunda preocupación y enfático repudio ante las decisiones de la Secretaría de Cultura de la Nación que afectan el desempeño de instituciones que preservan el acervo patrimonial del país federal -se remarca-. La clausura del Museo del Traje y el desplazamiento de las directoras de la Casa Histórica de la Independencia de Tucumán y la Casa del Acuerdo de San Nicolás, junto a la desvinculación del director del Museo Histórico Nacional, ponen de relieve el desapego de la política del gobierno nacional a la gestión profesionalizada de los museos públicos, y atentan contra la continuidad de planes museológicos y contenidos renovadores de nuestra cultura histórica”.

“Asaih se solidariza con los profesionales afectados, recuerda la importancia de los concursos públicos en la dirección de los museos y renueva su compromiso con la actualización, innovación y divulgación de contenidos históricos que ayuden a entender los lazos que nutren el pasado y el presente nacional”, concluye.

Además, la comunidad académica de todo el país impulsó un comunicado de repudio que ya recogió más de 3500 firmas de historiadores e intelectuales como Mario Pecheny, Magdalena Candioti, Graciela Schuster, Silvana Palermo, Soledad Quereilhac, Silvia Dolinko, Mario Rufer, Alejandro Thornton, Vera Carnovale, Lucas Glasman, Sofía Tiscornia, Sergio Serulnikov, Pablo Alabarces, Marina Franco y Omar Acha, entre muchos otros. “Constantemente llegan firmas de todas las universidades del país, públicas y privadas, y muchas del extranjero, de docentes, investigadores, estudiantes y gente de la cultura. Una reacción saludable y generalizada frente a este atropello”, dijo el historiador Gustavo Contreras a LA NACION.

“[…] Gabriel es un profesional de una amplia y reconocida trayectoria académica, destacándose por sus labores como investigador y docente y, en particular, por su actividad en el plano de la divulgación histórica, la que lo condujo a la dirección del citado Museo […] -se lee en el comunicado-. Su tarea como especialista en historia argentina del siglo XIX ha favorecido con creces las propuestas de ambos museos. A su vez, su afán por ofrecer contenido de calidad y atractivo para públicos amplios, lo llevó a impulsar, junto a sus equipos de trabajo, muestras impactantes como la del rock argentino y la del fútbol nacional que convocaron multitudes y acercaron a muchísima gente al conocimiento de nuestra historia en un sentido amplio y profundo”.

Los firmantes, que exigen la restitución de Di Meglio en el cargo y el envío de una partida presupuestaria acorde a las labores que lleva adelante el museo y sus trabajadores, aseguran que este despido representa “un ataque al derecho que tenemos de contar con museos públicos con contenido histórico de calidad, con presupuestos acordes y propuestas renovadoras para la ciudadanía en su conjunto” y “un episodio más del ataque generalizado contra la educación pública, la cultura pública, las universidades nacionales, el Conicet y una larga lista que lamentablemente no para de crecer”.

Las direcciones de Escuelas y Departamentos de Historia de universidades nacionales, además de expresar su preocupación por la remoción de Di Meglio, repudiaron el “avasallamiento de las y los científicos desplazados por motivos ideológicos de los puestos obtenidos de manera legítima, en reconocimiento de sus trayectorias en áreas de especialidad” y reconocidos en el país y en el extranjero.

Por último, en la Cámara de Diputados, los legisladores de izquierda Christian Castillo, Nicolás del Caño, Alejandro Vilca, Vanina Biasi y Vilma Ripoll presentaron un proyecto de resolución en el que repudian el despido de Di Meglio, denuncian “el contexto” en que se realizó (por las declaraciones del director sobre el presupuesto o, mejor dicho, la falta de presupuesto del MHN) y expresan su solidaridad con el historiador. (Daniel Gigena, La Nación)

Fuentes: