3/7/20

Haciendo Memoria

INGRESÉ EN 1975
Por Claudia Cesaroni


Ingresé al Normal de Quilmes en 1975, sin conocer a nadie. Llegaba allí desde la humilde Escuela 47 de Bernal, y tanto el edificio como las personas que lo habitaban me resultaban hostiles. Soy tímida, aunque no parezca, así que no enganchaba con nadie.

Hasta que un día se acercó una piba, y me dijo, de sopetón: "¿Querés ser mi amiga?"

Le dije que sí, ella me sumó a otra amiga, y formamos un trío, con centro en Marcela, que siempre anda haciendo eso: uniendo amigas.

De ese primer año antes del horror, me acuerdo también de nuestra "celadora", que yo amaba. Se llamaba Amalia Pfisterer, era grandota, y me encantaba abrazarla en los recreos y contarle mis dramas de entonces.

También me acuerdo de los preceptores de los que todas estábamos enamoradas platónicamente, con los que me la pasaba apostando sanguches del kiosko de Carmen Curtis a favor de River, ellos por Quilmes. Casi siempre ganaba yo.

También me acuerdo que los chicos más lindos estaban, como siempre, en 1ro. 1ra., y que ninguno me daba bola.

"Necesito alguien que emparche un poco y que limpie mi cabeza...
Que cocine guisos de madre, postres de abuela y torres de caramelo."
Marcela y Fabiana me regalaron para mi cumpleaños un disco de unos pibes que para mí eran desconocidos. Yo escuchaba Alta Tensión y Música en Libertad (y en ese colegio cheto me gastaban un poco por eso), así que ese regalo tenía una especie de función pedagógica.

Yo lo amé, y es uno de los pocos que conservo. Me acordé de todo esto recién, cuando me duchaba, y empecé a tararear porque sí, o porque no, una canción de ese disco.

Nosotras nos la pasábamos cantando Natalio Ruiz por los pasillos de la escuela, pero el tema que me vino es este.

Gracias amiga del alma Marcela Villar por esa pregunta, por ese disco, por los 45 años desde aquel ¿querés ser mi amiga?


2 de julio de 2020